En nuestro barrio como en tantos
otros, sufrimos los problemas ocasionados por las pintadas en las paredes
(simples firmas garabateadas o grafitis presuntamente artísticos), excrementos
de animales domésticos, vertidos de porquerías al suelo, mobiliario urbano y juegos infantiles
deteriorados por actos vandálicos, mal uso de los contenedores de basuras,
solares llenos de maleza etc. Estas agresiones contra los espacios comunes
muestran una falta de respeto de algunas personas por los demás: minoritarios o
no, son individuos mal educados, o vándalos. También muestran la incompetencia
o negligencia de los poderes públicos que toleran, no vigilan y castigan
adecuadamente o no remedian estas actividades nocivas. Concienciar de cumplir
unas normas mínimas de urbanidad, de elemental buena educación para respetar al
prójimo, evitar molestias y mantener y no deteriorar el entorno común.
Hacer de Santa Isabel un barrio más cohesionado socialmente, cívico, limpio y
acogedor, respetuoso con los derechos de las personas, los espacios públicos y
el paisaje urbano, es tratar de configurar un modelo de barrio que requiere la
implicación y la participación de todos los santaisabelinos.
diariodelavega.com
ResponderEliminarLas noticias sobre actos de vandalismo cumplen una función crucial en la sociedad. Al difundir tales eventos, concientizan sobre el daño a la propiedad pública y privada, impulsando la búsqueda de soluciones y la prevención de futuros incidentes.