Fiscalía pide 180 años a 8 acusados de asaltar pisos y raptar a los dueños

// DEJA TU COMENTARIO
Les imputan dos secuestros en casas de Zaragoza (Santa Isabel) y uno en un pueblo de Toledo. Una víctima repelió a guantazos un intento de robo que los acusados niegan.


La Fiscalía solicita condenas que suman 181 años de cárcel (van de los cinco a los 44 años) para ocho jóvenes acusados de integrar una banda dedicada a asaltar pisos para desvalijarlos.

Varias víctimas declararon que, para acceder a sus viviendas, los asaltantes les mostraban falsas placas de la Guardia Civil y simulaciones de autos judiciales. Una vez dentro, les reducían, maniataban (en ocasiones con esposas) y amordazaban esgrimiendo revólveres y utilizando pistolas eléctricas.

En una ocasión, en marzo del 2009 en Santa Isabel, el secuestro de los tres inquilinos duró cinco horas e incluyó la agresión sexual de uno de los ladrones a la única mujer que se encontraba en la vivienda, a la que sometió a tocamientos libidinosos. Esta señaló ayer a uno de los acusados, A. R. G., como el autor de los abusos. Este, a quien una huella dactilar sitúa en el escenario de los hechos, se negó a declarar.

Ocho meses más tarde, una mujer era retenida, esposada, durante dos horas en su casa de Ontigola (Toledo) por dos jóvenes que, tras entrar en ella haciéndose pasar por guardias civiles, la desvalijaron. Todos los acusados negaron ayer haber participado en ese asalto. Incluso G. A. R. G., cuya huella detectó la Policía en la vivienda: "Yo no tengo explicación para eso".

RESISTENCIA Poco después, el 8 de enero del 2010, se produjo otro episodio (también en Zaragoza) que los investigadores atribuyen a los acusados y que estos niegan. Poco antes de la una del mediodía de esa jornada, dos falsos guardias civiles acceden mostrando sus placas de pega al piso que compartían B. K. y A. K., a los que ataron de pies y manos y asieron a la pata de una de las camas tras encanoñar al primero de ellos. B. K. señaló a D. F. M. C. como uno de los autores y reconoció una prenda intervenida a otro imputado, aunque ayer no compareció en el juicio.

Simultáneamente, dos personas que se hacían pasar por policías intentaban entrar en el piso de otro vecino de ese mismo bloque, que lo impidió a guantazos. Fiscalía sostiene que eran los mismos que retenían a B. K. y a A. K., que habrían sido alertados por otros integrantes del grupo que vigilaban la zona. Los procesados lo negaron, como la acusación de integrar una banda. Se conocían, eso sí, y coincidían a veces en Zaragoza o Madrid. Como la madrugada en la que fueron detenidos bajo un mismo techo.

0 comentarios:

Publicar un comentario

Santa Isabel Tuya te agradece tú comentario. Un saludo.