Fomento ha precipitado su estreno en 12,3 kilómetros desde Plaza a la A-68 y entre Santa Isabel y Malpica.La señalización confunde a muchos usuarios a pesar de mantener la restricción de velocidad a 80 Km/h.
Después de más de dos años de espera para ver culminada la ampliación de la Ronda Norte de Zaragoza, de ver paralizados los trabajos en dos ocasiones (la última a finales del 2010) y cuando ya solo falta la recta final, al Ministerio de Fomento le han entrado las prisas y ha decidido poner en servicio el tercer carril de circulación en dos de cuatro tramos pendientes, desde la conexión con la A-2 y Plaza hasta el enlace con la AP-68 y Ranillas, y entre el polígono de Malpica y Santa Isabel. Y lo ha hecho aunque sea en precario y con unas condiciones de seguridad muy cuestionadas, ya que presenta deficiencias que pueden ser peligrosas para los usuarios y para los propios trabajadores que siguen dando los últimos remates a escasos metros de los vehículos.
Al menos se mantiene la restricción de velocidad a 80 km/h, aunque sea con unas condiciones de seguridad deficientes, sobre todo en lo que se refiere a la señalización y a la información que se ofrece a los usuarios. Se han habilitado tres carriles por sentido delimitados por un entramado de líneas amarillas, blancas y negras que generan confusión en algunos puntos. Sobre todo al amanecer y al atardecer, o si está lloviendo, cuando a la vista del conductor el reflejo en la calzada hace que predominen las marcas viales que se han ocultado con pintura negra, de manera que son muchos los vehículos que tienden a invadir el carril contiguo o incluso a desorientarse. De forma involuntaria podría provocar accidentes y la probabilidad es alta en una circunvalación por la que a diario transitan más de 50.000 coches y camiones.
Al parecer, la decisión fue adoptada a finales de la semana pasada por la Demarcación de Carreteras de Aragón y su máximo responsable, Rafael López Guarga, ya que fuentes oficiales del ministerio, en Madrid, aseguraron desconocer las condiciones en las que se iba a abrir este tercer carril. En cualquier caso, la única razón aportada es que se prefirió ponerlo el servicio aún a sabiendas de que falta renovar la capa de asfalto porque se esperará a hacerlo en primavera, cuando mejoren las condiciones climatológicas. ¿Es precipitado abrirlo así al tráfico?
Mientras, hay más fluidez en el tráfico. Es la nota positiva, por ejemplo, en el tramo entre Santa Isabel y Malpica, donde se ha trabajado sobre todo en la mediana, dejándola en una barrera de hormigón que mejora la visibilidad. También entre Plaza y Ranillas, donde se han habilitado 3.000 metros de vías colectoras en sentido Barcelona y otros 2.000 en sentido Madrid, que independiza el tráfico de largo recorrido de los movimientos locales hacia Miralbueno, la N-232 y la A-68.
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